martes, 29 de septiembre de 2015

¿Que valores fortalecen los adolescentes con el internet?

Los jóvenes en la actualidad estamos atravesando por una gran crisis, esta se funda en la carencia de valores que mostramos en la actualidad frente a los individuos de la sociedad; cada vez hay menos tolerancia, mas violencia, carecemos de solidaridad y tenemos un menor compromiso con la comunidad, lo cual esta produciendo una bomba de tiempo que va creciendo día a día y está destina tarde o temprano a explotar, lo que sin duda alguna llevara al caos total en toda la humanidad. Para analizar el complejo problema que afrontamos haremos un pequeño estudio de los dos mentores más fuertes que tiene el hombre en el desarrollo de su comportamiento y personalidad, la familia y la sociedad que lo rodea, la cual lógicamente está afectada por mas individuos moldeados por el estado. 


¿Porque los adolescentes no confían en los mayores de edad?

Los adolescentes se sienten cómodos entre sus compañeros, quienes atraviesan los mismos cambios físicos y psicológicos que ellos. Es de mucha ayuda tener amigos que estén viviendo las mismas experiencias y que pueden disminuir las ansiedades de los momentos difíciles. Cuando cuestionan las ideas o normas de los adultos, recurren a ellos para pedirles consejo, y cuando se plantean ideas o valores nuevos, pueden hablarles abiertamente sin temor a ser ridiculizados por los adultos o sentirse fuera de lugar. El grupo de compañeros también es un lugar donde establecer relaciones cercanas, que sirven como base para la intimidad en la edad adulta. Además, los amigos proveen diversión y emoción a los adolescentes con su compañía y recreación.


La espiritualidad marista me ha dejado grandes enseñanzas en mi vida como, tener en cuenta y poner en practica siempre los valores maristas en mi vida y así ayudar al prójimo sin esperar nada a cambio. a vivir la solidaridad de una manera sincera diariamente.



La espiritualidad marista es la herencia de su fundador San Marcelino Champagnat: 

  • Es “mariana y apostólica”. El centro es saberse amado por Dios y verlo en Jesucristo.
  • Tomar a la Santísima Virgen como primera discípula de Cristo que es para nosotros Madre.
  • Dar a conocer a Jesucristo y hacerlo amar.
  • Con atención al más necesitado.
  • Sencillez en el trato, cercanía, servicio, entusiasmo en el trabajo, alegría y amor.